miércoles, agosto 09, 2006

Volar, volar

Anoche volví a soñar que volaba.
Pero no lo hacía como antes en posición horizontal, con un gran esfuerzo y aleteo de brazos. Volaba parada, con sólo inspirar profundamente. Volaba cuando quería, en mi casa, en medio de la gente, en oficinas y al aire libre.
Me elevaba derecha como una estaca, con tanta facilidad que cualquiera hubiese dicho que nací pájaro.
Yo no quiero creer tanto en los sueños, pero supongo que ese vuelo describe mi forma de encarar la vida en la actualidad.
Vuelo, vuelo cuanto quiero, aunque a veces me gustaría que algún viento me trajera a la tierra.