miércoles, enero 05, 2005

Tarde de miércoles, Noche de Reyes

Hay personas de las que debemos huir y no justamente porque nos caigan mal.
Un fósforo y una mecha no tendrían que mirarse, jamás.
Tampoco una horca y un cuello.
O un pan y la manteca, un hilo y la aguja, esos pares desparejos pero complementarios que andan por el mundo acercándose y alejándose para suerte o desgracia.
Creo que soy afortunada.
No todos poseen esta clase de conocimientos.
¿Lo soy?
Mejor voy a poner los zapatos.

5 comentarios:

thirthe dijo...

...que los encuentres por la mañana
...cubiertos de regalos, claro.

besos para la amiga sabia.

manuel_h dijo...

ya deben estar llenos
un zapato y un regalo, ¿se juntan bien?

Alicia A Traves del Espejo dijo...

Creo que no hay una yunta más conveniente que un zapato y un regalo, fuera, obviamente, de un zapato y una media, Manuel H. Sí Mad, los zapatos estaban emparejados. Thirthe: mis zapatos estaban llenos de regalos, una apacible siesta al sol, la levedad de la brisa entre los sauces, esperanzas de un año más divertido, y como siempre, también ustedes.
Besos de un 6 de enero.

Alicia A Traves del Espejo dijo...

Creo que no hay una yunta más conveniente que un zapato y un regalo, fuera, obviamente, de un zapato y una media, Manuel H. Sí Mad, los zapatos estaban emparejados. Thirthe: mis zapatos estaban llenos de regalos, una apacible siesta al sol, la levedad de la brisa entre los sauces, esperanzas de un año más divertido, y como siempre, también ustedes.
Besos de un 6 de enero.

Alicia A Traves del Espejo dijo...

Creo que no hay una yunta más conveniente que un zapato y un regalo, fuera, obviamente, de un zapato y una media, Manuel H. Sí Mad, los zapatos estaban emparejados. Thirthe: mis zapatos estaban llenos de regalos, una apacible siesta al sol, la levedad de la brisa entre los sauces, esperanzas de un año más divertido, y como siempre, también ustedes.
Besos de un 6 de enero.